Un viaje que en un principio era una huida, pero que pronto se convirtió en una aventura de cariz insospechado. En un valle rodeado de montañas, Enrique encontrará una comunidad que guarda un secreto milenario, una mujer que parece vivir fuera de este milenio y una libertad que ni él mismo sabía que buscaba.
Su destino personal, que parecía llamado a ser gris y consabido, se tuerce completamente para ligarse a unas aspiraciones colectivas en las que ya creía incluso antes de conocerlas. Unas aspiraciones sencillas y radicales con las cuales es fácil sentirse identificado y demasiado a menudo difícil de llevar a la práctica.